AUTOCOMPLACENCIA CONVERTIDA EN VIRTUD

Novedades de Lervig, Evil Twin y KeesSatisfacción por los propios actos o por la propia condición o manera de ser, así define la Real Academia Española el término autocomplacencia. En exceso, a veces, puede convertirse en un claro defecto de personalidad que desemboque en egocentrismo y narcisismo. Pero esto no te ocurrirá si eres un tipo del norte, presumes de barba espesa y además haces cerveza. Si respondes a este perfil, cogerás toda esa autocomplacencia que encuentres en tu interior y la canalizarás a través de fermentadores, densímetros y sacos de maltas y lúpulos para regalarle al mundo, y a ti mismo, el mejor de los brebajes conocidos.

Y una buena prueba de autocomplacencia cervecera es lo que desde vivalabirra os presentamos esta semana. Empezamos.

Desde Stavanger, Noruega, Mike Murphy decidió regalarse a sí mismo para su 40 cumpleaños esta IPA para que le ayudara a combatir cualquier atisbo de crisis de mediana edad.

LERVIG BREWERS MASTER OAT IPA se trata de una IPA de más de siete grados de intenso cuerpo gracias a su 25% de maltas de avena, y lúpulos Nelson Sauvin y Hallertau que aportan un aroma afrutado y un suave sabor a uva blanca.

Nos vamos a Dinamarca, país que vio nacer a un tal Jeppe Jarnit-Bjergsø, (condenados nombres nórdicos…) más conocido por sus creaciones para Evil Twin, actualmente en la costa este de los EE.UU. En este caso nos encontramos ante un “amargo” homenaje a las pocas cervezas que sobrevivieron a la inundación sufrida por una prestigiosa tiendecita de Copenhague mientras sus propietarios daban brincos a ritmo de heavy-metal en el festival de Roskilde.

EVIL TWIN HOP FLOOD es una amber ale de siete grados bien oscura, con marcados aromas a caramelo y de intenso sabor a maltas tostadas, especias, notas herbales procedentes del lúpulo y un toque picante y seco cuando pasa por la garganta.

Por último, viajamos a Holanda a conocer a Kees Bubberman. Cansado de trabajar para Emelisse, a principios de este 2015 decidió abrir una fábrica con su propio nombre (un tipo original este Kees), y poder dar rienda suelta a toda su creatividad a la hora de elaborar cervezas. Su ojito derecho es esta Russian imperial stout, de la cual se siente más orgulloso y complacido.

KEES EXPORT PORTER 1750. Más de diez grados se encierran tras esta stout “oscura y pegajosa hasta los huesos”, como advierte su etiqueta. De sabor suave y dulce, se aprecian los aromas a cacao y café clásicos del estilo, con un final amargo y ahumado con leves notas a frutos secos. Y sí, hemos dicho bien, Russian imperial stout, particular homenaje del señor Bubberman a ese estilo nacido del porter tan demandado por la corte de los zares rusos allá por el siglo XVIII, de ahí el nombre elegido para esta particular receta.

Deja un comentario

Usamos cookies para que tengas la mejor experiencia de usuario. Para aceptarlas, haz click en el botón "ACEPTAR". Puedes consultar aquí nuestra política de cookies

ACEPTAR
Aviso de cookies