Vivimos tiempos convulsos… en lo político, social e incluso atmosférico. Pero a estas alturas no vamos a dar la «chapa» ni a ponernos intelectuales con rollos filosóficos. Que cada cual haga su propia lectura de la realidad que nos toca vivir. Igual que con la cerveza, hoy os presentamos siete brebajes con muy distintas y particulares formas de elaboración, que cada cual las juzgue según su propio criterio. Y ya por hacer la gracia cinematográfica, ideales para sentarse delante de la tv a ver la peli de Ralph Fiennes.
Ahí van:
– Magic Rock en colaboración con los americanos de Against The Grain EL GINGERO. Doble stout de 7,5 grados con avena, corteza de naranja y miel.
– Brew York TONKOKO. La hermana pequeña de aquella imperial Tonkoko que ya presentamos hace unos meses de esta fábrica inglesa, que nada tienen que ver con Nueva York, sino más bien con la ciudad inglesa de York. Stout dulce de 4,3 grados y añadidos de coco, cacao, vainilla, haba tonka y lactosa.
– Laugar en colaboración con los polacos de Browar Stu Mostów FUNKY ESPRESSO. Sour ale de 4,8 grados con centeno, copos de avena, café de Kenia y una fermentación mixta con lactobacilus.
– Naparbier SPOILER, de su serie «Barrels», cervezas con maduración en diferentes barricas. Sour ale de 7,8 grados madurada en barrica de amontillado, una variedad de vino dulce, parecido al Jerez, procedente de la región cordobesa de Montilla.
– In Peccatum I AM THE BLACK WIZARDS. Imperial, o heavy (mira que es «heavy» este Alberto) stout de 9,99 grados (el número de la bestia invertido, claro) con miel, cacao, canela y harissa (un tipo de salsa picante).
– La Grúa MACHICHAKO. Desde Cantabria, una russian imperial stout de 10,6 grados con trigo y avena.
– The Flying Inn LOCAL ROAST. Desde Valladolid llega esta export porter de 5,8 grados con café de Burundi tipo Mpanga, caracterizado por sus clásicas notas afrutadas y cacao amargo. El café es cortesía de la gente de Puchero Coffee Roasters, expertos tostadores de café (también pucelanos ellos, mira tú).