Aunque lo parezca, en este caso que nos ocupa, amarillo se escribe tal cual, no yellow. Y, aunque también lo parezca, hablamos de lúpulos, no de colores. Y para concretar del todo el título, hablamos de la nueva IPA de la fábrica artesanal asturiana COTOYA a base de este lúpulo.
Empezábamos el año con el lanzamiento mundial de la “antípodas”, la IPA gestada por Diego Rodríguez en su micro de Santo Adriano, a base de Waimea, lúpulo neozelandés. Esta semana, y siguiendo con la tendencia de las monovarietales, tenemos el placer de presentaros su “VGXP01”. Una IPA cítrica, terrosa y amarga, con un carácter definido por el empleo de ese lúpulo cultivado por Virgil Gamache Farms en el mítico –al menos para el cervecero- valle de Yakima. El resultado es una cerveza dorada oscura y turbia con aroma y sabor cítrico, terroso y resinoso con un final amargo y regusto seco. Como datos adicionales: 6,3 grados y 99 IBUs, casi nada.
El lúpulo amarillo es bastante reciente, resultado de una combinación de otros lúpulos. Igualmente potente en aroma y amargor, con notas florales y cítricas. El sabor que aporta es muy cítrico, tirando a naranja y mandarina, aportando también un dulzor moderado. Pero podemos resumirlo todo llamándolo por el sobrenombre con el que se le conoce al otro lado del charco, el super-cascade!! Ello es debido a su alta concentración de ácidos alfa, hasta un 11% (de ahí los 99 IBUs de la criatura que nos ocupa). Bienvenida, “VGXP01”.